El Caldo de Huesos es una fuente rica en nutrientes de rápida absorción como colágeno, aminoácidos, vitaminas y minerales.

Colágeno:

Es la proteína más abundante del cuerpo y una de las más importantes a nivel estructural. Es fundamental para la salud de la piel, la pared intestinal, los cartílagos, el cabello y las articulaciones, ayudando a mantener su resistencia y flexibilidad. También cumple un papel clave en la regeneración de tejidos y en la integridad ósea.

Aminoácidos:

El caldo de huesos contiene aminoácidos esenciales que el cuerpo puede absorber fácilmente. La glutamina favorece la salud intestinal, mientras que la glicina ayuda a reducir la inflamación en las articulaciones. La prolina es fundamental para la regeneración de la piel y la cicatrización de heridas, mientras que la lisina contribuye a la salud ósea y tiene un efecto preventivo contra la osteoporosis.

Vitaminas:

Aporta vitaminas esenciales para el bienestar general. La vitamina A, en forma de retinol, es clave para la salud de la piel y la visión. La vitamina K es necesaria para la coagulación sanguínea, mientras que la vitamina C actúa como antioxidante y refuerza el sistema inmunológico. La vitamina D, por su parte, es crucial para la absorción de calcio y el mantenimiento de huesos fuertes.

Minerales:

Es una fuente rica en minerales fundamentales para el organismo. El calcio y el fósforo trabajan en conjunto para fortalecer los huesos y dientes. El magnesio contribuye a la regulación de la glucosa en la sangre, y el hierro es esencial para la formación de glóbulos rojos. El manganeso desempeña un papel clave en la función cerebral, mientras que el potasio ayuda a equilibrar líquidos y electrolitos. El sodio es necesario para la función nerviosa, y el zinc refuerza el sistema inmunológico.