La ciencia respalda lo que las abuelas siempre han afirmado durante generaciones, acerca del caldo de pollo durante los resfriados

Tu abuela no estaba equivocada cuando te explicaba las virtudes de disfrutar de un reconfortante caldo caliente cuando no te sientías bien.

Paulina Roca, coach en salud con 15 años de experiencia, compartió su perspectiva sobre el tema, diciendo: “Cada día nos topamos con personas que están lidiando con resfriados y dolor de garganta, que comienzan a sentirse mal. En tales situaciones, al llegar a casa, lo que realmente apetece es disfrutar de un reconfortante caldito, preferiblemente de pollo”. Su reflexión surge de sus interacciones diarias, y destaca: “Presten atención, porque lo tradicional no solo es efectivo según la experiencia, si no que científicamente se ha demostrado que tomar un caldo de pollo es beneficioso cuando uno no se siente bien”.

Está respaldado científicamente que el caldo de huesos de pollo, especialmente debido a su alto contenido proteico, constituye una fuente nutritiva abundante en vitaminas B, hierro, zinc, entre otros nutrientes. Este hecho resulta especialmente relevante, ya que contribuye a mantenernos hidratados, lo cual es esencial cuando enfrentamos un resfriado. Además, el caldo posee propiedades antiinflamatorias en las vías respiratorias, explicando así por qué es tan reconfortante consumirlo cuando nos sentimos mal. No solo se trata de una agradable tradición, si no que, desde una perspectiva científica, sabemos que contribuye al proceso de recuperación. Por lo tanto, asegurémonos de tener un suministro de caldo de pollo a la mano, y aún mejor si ya está listo para ser disfrutado.

BAAK BONE BROTH, el primer caldo de huesos en envases individuales, listo para consumir, desaparece por completo la idea de que preparar caldo de huesos de pollo es una tarea tortuosa. BAAK ha llegado al mercado mexicano a cambiar el viejo paradigma y se presenta como una solución genuina al desafío de cocinar durante horas, ya que está listo para ser disfrutado, no contiene conservadores y es seguro para la salud, sin necesidad de refrigeración. Ahora puedes hacer caso al tradicional consejo de la abuela: “tómate un caldo de pollo apenas incien los síntomas del resfriado”.

Este caldo no solo alivia los síntomas, si no que contribuye a mantenerte bien alimentado cuando más lo necesitas.